Fechoría Mona Lisa

A los tres años y medio de edad y a la salida del cole, Berta le cogió gusto a eso de las intervenciones callejeras a base de tampón, collage y spray en compañía de su papi. ¡Qué le vamos a hacer!.
Mi amigo Gon, vasco de pura cepa, dice que ésto no es "kale borroka" sino "Valdalismo".
Yo creo que no hay para tanto, es sólo un entretenido y efímero homenaje a Leonardo da Vinci.







Dedicados













Serie Little Ego










La serie Little Ego consiste en un conjunto de veinte obras, apoyadas sobre dos estantes concebidas para ser tocadas y observadas por ambos lados, como si de libros se tratara.




La Joconde cést moi
Técnica mixta y pelo sobre madera


Ego me absolvo
Técnica mixta y collage sobre madera

Entrada obra
Técnica mixta y collage sobre madera


Mi padre
Dibujo sobre cupones racionamiento de la post guerra

Razón aquí
Técnica mixta y collage sobre madera


To me or not to be
Técnica mixta y collage sobre madera












Hágase rico junto al artista



 El viaje del niño Ildefonso

El protagonista, "el niño Ildefonso" (una figura de porcelana), adquiere los números de la suerte en diferentes administraciones de lotería repartidas por toda la geografía nacional.








pinturas

del 4 al 21 de diciembre de 2002 
Galería Belarde 20. Madrid.

del 4 al 15 de diciembre de 1997
Galería Castellví. Barcelona.


Los cuadros de esta exposición son auténticas participaciones de lotería de Navidad: Cada uno de ellos está dotado de aquellas condiciones de validez que los convierten en legítimos títulos al portador.  Son contratos privados entre el firmante (yo, De Val) y el portador (el comprador del cuadro o cualquier otra persona en posesión material del mismo). 

Hay tres tamaños de cuadros: grandes (que incluyen diez décimos de participación de lotería), medianos (que incluyen cinco) y pequeños (que incluyen dos). Lógicamente he comprado, y guardado a buen recaudo, no sólo la cantidad de lotería que ofrezco en mis cuadros, sino otra cantidad similar para mí: ¨Hágase rico junto al artista". He elegido los números entre los 66.000 de que consta el sorteo y los he adquirido en administraciones de lotería de Sort, Manises, Murcia, Granada, Sevilla, Cáceres, Lugo, Burgos, Madrid y Barcelona.

Si el número que aparece en la obra es agraciado con un premio en el sorteo, yo, el artista, me comprometo a pagar al portador del cuadro la cantidad que le corresponda. Es justo que vaya a la cárcel si no cumplo dicho compromiso. El premio máximo es de 2 millones de euros, 1 millón de euros o 400 mil euros (en función del tamaño del cuadro); premio que gustosamente pagaré si el número coincide con el del "gordo" de Navidad de 2002.


En caso de que alguno de los números reseñados en los cuadros de la exposición resulte favorecido con el primer, segundo o tercer premio, he previsto la inmediata contratación, a mi cargo, de un servicio de vigilancia jurada que vele por la seguridad del cuadro durante las primeras 24 horas a partir del momento del sorteo. Cualquier cuadro roto o enmendado será nulo. Del mismo modo, carece de validez jurídica cualquier reproducción de las obras de la exposición. El cuadro es el propio documento y debe ser entregado al depositario (antes de tres meses, a contar desde el día del sorteo) para que éste haga efectivo el pago del premio que le haya correspondido.


El compromiso expuesto en el presente texto se hace a mayor abundamiento del que ya consta en los propios cuadros.

De Val, noviembre de 2002


Dieciséis mil ciento diez
(Máquina macho para fabricar la suerte a dicho número)
Acrílico y collage s/ madera
81 x 130 cms.
Lotería adquirida en Sort (Lleida)
Treinta y siete mil quinientos uno
(Biblioteca de la Vieja Peseta)
Acrílico y collage s/ madera
81 x 130 cms.
Lotería adquirida en Manises (Valencia)
Cuarenta y cuatro mil seiscientos ochenta y dos
(Del diario de viaje de un Pensador Solitario I)
Acrílico s/ madera
81 x 130 cms.
Lotería adquirida en Murcia
Dos mil ochocientos cincuenta y tres
(Granada Casahome)
Acrílico y collage s/ madera
81 x 130 cms.
Lotería adquirida en Granada
Veintisiete mil ochocientos cincuenta y cuatro
(Descuatrizado I)
Acrílico s/ madera
81 x 130 cms.
Lotería adquirida en Sevilla
Cuarenta y seis mil setecientos cuarenta y cinco
(Ese toro enamorado de la luna)
Acrílico s/ madera
81 x 130 cms.
Lotería adquirida en Cáceres
Sesenta y un mil novecientos sesenta y seis
(El Tiempo pasa volando)
Acrílico s/ madera
81 x 130 cms.
Lotería adquirida en Lugo
Veintisiete mil ochocientos treinta y siete
(Bandera de espectáculo)
Acrílico s/ madera
81 x 130 cms.
Lotería adquirida en Burgos
Cincuenta y cinco mil setenta y ocho
(Amo a mi Menina)
Acrílico y collage s/ madera
81 x 130 cms.
Lotería adquirida en Madrid
Tres mil cuatrocientos noventa y nueve
(Biblioteca de Pasión y Arte)
Acrílico y collage s/ madera
81 x 130 cms.
Lotería adquirida en Barcelona




FUENTES JURÍDICAS SOLVENTES HAN ELABORADO EL SIGUIENTE INFORME PARA LA EXPOSICIÓN “HÁGASE RICO JUNTO AL ARTISTA”

“nº55.793 Lotería Nacional. El gachó que exibe el presente aforo la cantidad de mil legañas pa que se endiñe la tosta u sease una pasta mu gansa pa en el caso de que los guarismos indicaos al frontis sean agraciados en el sorte de la lote del día 21 de diciembre de 1984. Son mil chulas.” y al final “autógrafo con la firma debajo.

El número resultó premiado y en base al documento transcrito, su portador reclamó del firmante el pago del premio de una participación de lotería de 1000 pesetas en el nº 55.793. El segundo se negó a hacer efectivo el pago al primero negando la venta de tal participación y su firma en el documento privado, aduciendo que se había rellenado y firmado de manera alegre y en tono jocoso, pero sin intención alguna de que tuviera validez aquella broma.

El asunto llegó hasta el Tribunal Supremo que ratificó la condena del demandado a abonar el premio, sobre la base de que la entrega de una participación de lotería implica un contrato de cesión de derechos, realizada en el caso por precio, y de que en nuestra legislación, a partir del Ordenamiento de Alcalá, que inspira el vigente Código Civil, los contratos se perfeccionan y son obligatorios cualquiera que sea la forma en que se hayan celebrado, siempre que en ellos concurran las condiciones esenciales para su validez: consentimiento, objeto y causa. El consentimiento manifestado en forma alegre no vicia su existencia, ni la del objeto y la causa, cuando éstos resultan claros de aquella expresión y no cabe dudar de su validez, y el buen humor en la forma, como muestra de alegría y complacencia e incluso de la duda o esperanza sobre la buena suerte que haya de acompañar a los contratantes en el juego de la lotería, en nada empece a la seriedad del contrato.

El ejemplo expuesto sirve para poner de relieve que el llamado contrato de lotería, cualquiera que sea su forma, se configura básicamente como una relación obligacional en virtud de la cual la parte titular y depositaria de los billetes adquiridos directamente, los distribuye mediando precio u otra compensación e incluso a título gratuito, bien haciendo entrega de los propios ejemplares oficiales (décimos), o bien, por medio de lo que se denominan “participaciones” o “boletos”, representados por documentos privados, suficientemente adecuados, como expresivos de la participación que se adquiere en el décimo correspondiente. El expendedor se obliga de esta manera, caso de obtenerse premio, a satisfacer a los poseedores de las participaciones la cantidad que les hubiera correspondido por la suerte en razón al importe de los boletos. Lo que legitima para reclamar el premio correspondiente es la posesión material de la participación, pues suelen ser anónimas, salvo los supuestos de recibos nominativos. En todo caso, la identificación necesaria es la que proviene del expedidor-responsable que acredita la firma del boleto y los demás datos que se estimen convenientes para evitar su manipulación y fraude.

No cabe duda, pues, a la luz de las premisas expuestas, que los cuadros que aquí se exponen, independientemente de su valor pictórico y artístico, incorporan un auténtico contrato de lotería, de forma que con la entrega del cuadro se entrega también una verdadera y válida participación en el número correspondiente, en virtud de la cual, caso de salir premiado el número en ellos reseñado, el expendedor, en este caso el artista De Val, queda obligado a abonar a los compradores, poseedores de las participaciones que tales cuadros incorporan, la cantidad que les corresponda en razón al importe de las mismas. Difícil elección la del comprador, caso de resultar agraciado el número que aparece en el cuadro adquirido: quedarse con éste o hacer efectivo el premio, a cuyo pago el artista no puede negarse.




génesis 23 abril de 2012

Filmación.





Aire, agua y pigmento sobre papel.








Biblioteca inmaculada




Biblioteca inmaculada
Acrílico sobre tela 34 x 39 cms. 2011.











dorso / back

La creación

Una obra producida por azar / A work produced by chance.



Y Dios creó el mono
And God made the monkey

Acrílico sobre papel 19 x 19 cms. 2010.










Detalle de título.







Detalle de mono.





Biblioteca de hoy


Se inauguraba la exposición “Bordes”. Uno de los cuadros incluía recortes del periódico de aquel mismo día. Se llamaba “Biblioteca de hoy, 3 junio 1999”. Más rápido imposible, ¿no?

Era un cuadro pintado al límite del tiempo. Colgado junto a él, había una postal enmarcada que reproducía dicho cuadro en el anverso. En el reverso, bajo el lema “Hoy se vive muy deprisa”, aparecía yo, duchado y afeitado, desayunando ricamente con el citado periódico. Esta imagen permitía comprobar, como suele hacerse en los secuestros, que la foto no había sido hecha en días anteriores.
La noche había sido larga. Por la mañana, la inestimable colaboración del artista y gran amigo Pablo Martínez hizo posible que a media tarde dispusiera ya de la edición de cincuenta postales listas para ser firmadas y numeradas. Todo salió como estaba planificado.

Por si esto fuera poco, los recortes eran de un artículo que comentaba la exposición, ¿no es verdad?

Es verdad, esto no estaba planificado. La fortuna quiso que dicho artículo apareciera el mismo día y además acompañado de una fotografía de la exposición hecha el día anterior. Como si de una historia de Borges se tratara, mi cuadro acabaría llevando recortes de la fotografía en la que se veía, en el fondo, el marco vacío que le estaba esperando.




The “Bordes” exhibition was being inaugurated. One of the paintings included clippings from that same day's newspaper. It was called “Biblioteca de hoy, 3 junio 1999”. Any faster than that would have been impossible, wouldn't you say?

That picture was painted in record time. Hanging next to it was a framed postcard with a reproduction of the painting on the front. On the back, under the slogan “Hoy se vive muy deprisa” (Today we live very quickly) was a picture of myself, showered and shaved, enjoying my breakfast while reading that same newspaper. This picture made it clear to the viewer that the photograph had not been taken on previous days, like those often sent by kidnappers.The night had been long. That morning, the invaluable assistance of my good friend, the artist Pablo Martínez, made it possible for me to have fifty postcards published by mid afternoon, ready to be signed and numbered. Everything went as planned.
As if that weren't enough, the clippings were articles about the exhibition, weren't they?
They were, but that wasn't planned. Fate caused that article to appear on the same day, and it was even accompanied by a photograph of the exhibition taken the day before. Like in a Borges story, my painting ended up containing clippings of the photograph where you could see, in the background, the empty frame that awaited it.




Cartas a las Monas Lisas

Imágenes de la exposición en la galería Castellví de Barcelona en noviembre de 2007.






Bofetadas a la Mona Lisa
Acrílico y collage sobre madera 59 x 84 cms. 2007.









Cuento
Collage sobre madera 59 x 84 cms. 2007.







Obra
Acrílico y collage sobre madera 59 x 84 cms. 2007









Rojo (estados de ánimo)
Acrílico y collage sobre madera 59 x 84 cms. 2007.










Érase una vez un retrato

En la galería Esther Montoriol de Barcelona en la que realicé la exposición "Val de retro" existe un espacio subterráneo que sólo es visible a través de una ventana en el suelo de la sala. Enmarqué dicha ventana con un marco dorado y llené el espacio de infinitas reproducciones de la Mona Lisa. Mejor dicho, de infinitos objetos con su imagen. El marco no encuadraba la Mona Lisa, sino el fenómeno sociológico. Los objetos eran parte de una colección que comencé hace muchísimos años.

At the gallery Esther Montoriol in Barcelona where I held the "Val de retro" exhibition, there is an underground area that is only visible through a window in the floor of the room. I put a golden frame around that window, and filled the space with infinite reproductions of the Mona Lisa. Or should I say, with infinite objects bearing her image. The idea was not to frame the Mona Lisa, but the sociological phenomenon surrounding her. The objects were part of a collection I started many years ago.



Érase una vez un retrato
Instalación de objetos.
Galeria Esther Montoriol. 2001.























EL PAÍS, jueves 12 de julio de 2001



























Personalidad múltiple
EL PAÍS, Jaume Vidal
El arte es una buena manera de mostrar los diversos rasgos de carácter, a  veces antagónicos, que esconde la personalidad de quien escoge esta forma de comunicación. El origen del  trabajo de De Val se encuentra en la necesidad de expresar de manera artística las variadas inquietudes que lo motivan. Por eso ha utilizado personalidades diversas, expresadas en heterónimos. De Val hace un repaso de su trayectoria en la galería Esther Montoriol. En la misma sala expone Clara Brasca, que presenta  una serie de cuerpos desnudos. Con la indicación de nombres diferentes en los títulos de las obras demuestra que se trata de personas distintas, pero la plasmación plástica de óleo sobre lino unifica los rasgos personales que permanecen en secreto. Las múltiples personalidades se sintetizan ahora en una sola, idealizada.
Se suele identificar la obra de De Val (Barcelona, 1956) con la de los lomos de libros de nombres sugerentes, el De Val de bibliotecas inexistentes, pero bien halladas. El trabajo de De Val es tentacular. En la última edición de la feria New Art presentaba una crítica a la mercantilización del arte haciendo una asimilación al mundo de las competiciones de motor fuertemente dirigidas por las marcas publicitarias. La crítica al mercado del arte desde el mismo mundo del arte también se encuentra presente en Habitación en Arlés, donde el artista ordena todos los elementos que pueden ser robados del cuadro La Habitación del artista, de Van Gogh, verdadero paradigma de los contrasentidos del mundo del arte. De Val hace arte reflexionando sobre el arte. Sus pensamientos en voz alta tratan de evidenciar cómo la raya que sitúa la verdad y la mentira en territorios diferentes es débil y diluida. Y eso, aplicado a la creación artística, hace pensar en el mitificado concepto de obra auténtica y obra falsa. Por eso en esta antológica hay obras que podrían ser auténticos brossas o duchamps.
Cuando duda o cree que necesita un lenguaje diferente, De Val utiliza firmas heterónimas. Este recurso, de lúdica honestidad, hace que firme con su nombre las tendencias que van definiéndose como auténticas dentro de su manera de hacer artística. Así, las obras atribuidas a sus alias dejan de ser juegos conceptuales y estilísticos para convertirse en auténticas piezas deval.
Esta exposición tiene el aliciente de mostrar una selección de las 3.000 piezas que forman parte de la colección De Val de objetos con la imagen de la Mona Lisa. Podría considerarse una obra más del artista. 


















Esto no es un libro


Esto no es un libro
Galeria Maria Cilena. Milano. 1998.

Esto tampoco es un libro
Galería Castellví. Barcelona. 1999.

De tomo y lomo
Galería Sandunga. Granada. 2001.




"Esto no es un libro" no es un libro sino una exposición.
Exposición, una vez más, de las sempiternas obsesiones de De Val: la simulación, la apariencia, la verdad y la mentira, la apropiación, la identidad y la autoría.
Puede llamarse a engaño quien, desconociendo la trayectoria de este insomne artista, tope con este catálogo en forma de falso libro o vea su correspondiente exposición: no es un pintor figurativo convencional.
De Val se sitúa en la línea de figuras aisladas que, deudoras de Magritte, Duchamp o Man Ray, participan de una vertiente conceptual del arte, como pueden ser George Brecht, Joan Brossa, Marcel Broodthaers o Marcel Marïen. Cada uno de ellos propone su propia visión del mundo, pero comparten todos una actitud pluridisciplinar en donde lo que importa, fundamentalmente, es el concepto, la idea. La autoironía, el sentido del humor y una muy saludable voluntad de confundir categorías son asimismo rasgos comunes a todos ellos.
De Val, en esta exposición, ha optado por utilizar una técnica y un soporte pictórico "tradicionales" para, como diría Foucault, hacernos ver hasta qué punto es invisible la invisibilidad de lo visible. Es decir, en qué consiste la ficción.
Ficción... Ficciones: Borges1. Si en "La Biblioteca de Babel" Borges se refiere al Universo como Biblioteca, De Val, convencido de la capacidad metafórica y lingüística de la pintura, interpreta ésta como Universo, por lo tanto como Biblioteca. La Biblioteca, los libros, le sirven como metáfora del mundo. Son, en definitiva, una metáfora de la pintura, una metáfora del Arte.
Los libros cuentan historias: sus lomos las sugieren. De Val pinta lomos de libro, pero sus libros no son libros puesto que jamás han sido escritos. Son sólo lomos, lomos pintados. Como libros, entonces, son ficción. Sin embargo sí son historias, aunque no escritas, sólo pintadas. ¿Pero acaso no es lo mismo? ¿No suele decirse que un cuadro se "lee", igual que se lee un texto escrito?
Remitámonos a Gadamer cuando dice que un cuadro empieza a "descifrarse" de la misma manera que un texto, que se trata de construirlo como cuadro, leyéndolo, digamos, palabra por palabra, hasta que al final todo converja en la imagen del cuadro, en la que se hace presente el significado evocado en él. Toda obra deja al que la contempla un espacio de juego que tiene que rellenar.
La función del concepto es, pues, formar una especie de caja de resonancia donde pueda articularse el juego de la imaginación. ¿Y qué nos propone De Val sino un juego, una ironía? Con sus obras libera la recepción estética de su pasividad contemplativa. Consigue que, como espectadores o "lectores", participemos en la concreción del objeto estético. En palabras de uno de los siete lectores tipo que aparecen como personajes en el penúltimo capítulo del libro "Si una noche de invierno un viajero" de Italo Calvino: "El momento que más cuenta para mí es el que precede a la lectura. A veces basta con el título para encender en mí el deseo de un libro que tal vez no existe. (...) En fin: si a vosotros os basta con poco para poner en marcha la imaginación, a mí me basta aún con menos: la promesa de la lectura".
Los archivos, bibliotecas, enciclopedias que compone De Val contienen libros deliberadamente irreales, remedo de esos otros simulacros de libro que llenan y decoran los estantes de tantas supuestas bibliotecas, como lo es esa biblioteca idónea para Irnerio2, la "no letrada", compuesta por libros en cuyos lomos aparecen los signos utilizados por los ópticos para examinar la vista de las personas analfabetas, que no esconde su propia paradoja: la inutilidad de una biblioteca para quien no sabe leer. Paradójicamente puede decirse que en este caso incluso el no saber ocupa lugar. De hecho, el mismo que su complemento: el saber, es decir, la "Enciclopedia del Arte". De Val parece remitirnos con esta obra a la utópica obra de arte total, eterna aspiración, sueño imposible de todo artista: crear una obra que pueda ser la obra œnica que lo comprende todo porque en ella se agota la totalidad.
Se supone que una enciclopedia del arte contiene -o debería contener- todo lo referente al Arte. Pintándola, De Val magnifica ese todo, al ser la propia enciclopedia pintura, al ser ella misma Arte. De la misma manera que Pirandello teatraliza el teatro, Calvino noveliza la novela o Mompou musicaliza la música, De Val representa aquí el medio de representación mediante el propio medio. Pinta la historia del arte, pinta el arte, pinta la pintura. Es pintura de la pintura y el pintor es el pintado. Como sucede en la "Autobiografía en amarillo", "Casi todos italianos y excelentes pintores", "Cómo pintar en 7 tomos" o "No me lo tengan en cuenta y otros grandes libros", obras en las que De Val ejercita una vez más la autoconciencia -es decir, la iron’a respecto a la propia obra- poniendo de manifiesto que es la conciencia de la propia mentira la que otorga verdad a la obra y que "la autoironía moderna, destinada a subvertir las certezas hasta reducirlas a simulacros, es también un simulacro"3. Pero la fábula no termina aquí, sino que continúa en los dorsos de las obras. En esta parte habitualmente inmaculada y no visible, De Val juega, se entretiene, nos divierte y nos invita a jugar con él. Al descubrirlos nos convierte en cómplices: compartimos el secreto oculto tras el cuadro. Aquí prosigue asimismo la reflexión acerca de la identidad, la autoría, la apropiación y la simulación. Es aquí también donde pone De Val la guinda a sus "historias": el título. Esencial en sus obras, sugiere posibles nuevas "lecturas" a la vez que evidencia su interpretación irónica y crítica de la historia, la cultura y el paso del tiempo.
A modo de epílogo, un prólogo de Borges4: "Desvarío laborioso y empobrecedor el de componer vastos libros; el de explayar en quinientas páginas una idea cuya perfecta exposición oral cabe en pocos minutos. Mejor procedimiento es simular que esos libros ya existen y ofrecer un resumen, un comentario" o, añadiría yo, "un cuadro".

Esther Montoriol

1. "Ficciones" es el título de un libro de Jorge Luis Borges que incluye el relato "La Biblioteca de Babel".
2. Personaje de "Si una noche de invierno un viajero" de Italo Calvino que ha aprendido a no leer para experimentar cómo es nuestro mundo, lleno de escritura, para quien no lee.
3. "Sabiduría de la ilusión", Rafael Argullol, Ed. Taurus.
4. "Ficciones", Jorge Luis Borges, Alianza Editorial.






"This is not a book" is not a book, but an exhibition. 
Not only that, but an exhibition of De Val's eternal obsessions: pretense, appearances, truth, lies, appropriation, identity and authorship. He who comes across this false book or sees the corresponding exhibition unaware of this sleepless artist's history may be fooled: he is not a conventional figurative painter.
De Val is one of those isolated figures who, indebted to Magritte, Duchamp or Man Ray, share a conceptual vision of art, such as George Brecht, Joan Brossa, Marcel Broodthaers or Marcel Mariën. Each proposes his own vision of the world, but all share a pluridisciplinary attitude in which what matters, essentially, is the concept, the idea. Self-irony, a sense of humor and a very healthy desire to confuse categories are also features common to all of them. In this exhibition, De Val has chosen to use "traditional" techniques and pictorial media in order to, as Foucault would say, reveal to what extent the invisibility of the visible is invisible. In other words, what fiction is made of.
Fiction... Fictions: Borges1. If Borges, in "La Biblio-teca de Babel" [Babel's Library], refers to the Universe as a Library, De Val, convinced of the metaphorical and linguistic capacity of painting, interprets the latter as the Universe, and therefore the Library. The Library, the books, are his metaphor for the world. They are, in short, a metaphor for painting, a metaphor for Art.
Books tell stories: their spines suggest them. De Val paints book spines, but his books are not books because they were never written. They are only spines, painted spines. Therefore, as books they are fiction. However, they are indeed stories, just not written, only painted. But isn't it the same thing? Do we not often speak of "reading" a painting as we would a written text?
Let us reflect on Gadamer's idea that one begins to "decipher" a painting the same way one would decipher a written text: attempting to reconstruct the picture by reading it, as it were, word for word, until it all finally converges in the image of the painting, where the meaning evoked in it becomes present. All works allow the beholder a certain degree of slack, of space to play, where he must fill in the blanks.
The function of the concept is therefore to create a sort of sounding board to articulate the play of the imagination. And what does De Val propose, if not a game, an irony? With his works, he releases the viewer from contemplative passivity. He manages to make us, as spectators or "readers", participate in the completion of the esthetic object. In the words of one of the seven readers who appear as characters in second-to-last chapter of Italo Calvino's book "Se una notte d'inverno un viaggiatore": "The moment that counts the most for me is that preceding the reading. Sometimes just the title is enough to ignite within me the desire for a book that may not exist. (...) In short, if it does not take much to set your imagination rolling, for me it takes even less: the promise of reading".
The archives, libraries, encyclopedias composed by De Val contain deliberately unreal books, in imitation of those other false books that fill and decorate the shelves of so many alleged libraries,like that library suitable for Irnerio2, the "non-lettered" kind, made up of books whose spines only contain the symbols used by opticians to examine the eyes of illiterate patients, which is not without its own paradox: the uselessness of a library for those who do not know how to read.
Paradoxically, in this case even the lack of knowledge takes up space*: the same space as the knowledge alluded to in this picture's complementary painting, the "Enciclopedia del Arte" [Encyclopedia of Art]. With this work, De Val seems to refer us to the utopian total work of art, eternal aspiration, the impossible dream of all artists: to create a work that can be the only work encompassing all, because in it the whole is exhausted.
Presumably, an encyclopedia of art contains -or should contain- everything relating to Art. By painting it, De Val magnifies this idea of everything by making the encyclopedia itself a painting, by making it Art itself.
Just as Pirandello theatricalizes theater, Calvino novelizes the novel or Mompou musicalizes music, here De Val represents the means of representation through the media itself. He paints the history of art, he paints art, he paints painting. His painting is about painting and the painter is the painted. As shown in "Autobiografía en amarillo" [Auto-biography in yellow], "Casi todos italianos y excelentes pintores" [Almost all Italian and excellent painters], "Cómo pintar en 7 tomos" [How to paint in 7 volumes] or "No me lo tengan en cuenta y otros grandes libros" [Don«t hold it against me and other great books], works in which De Val once again exercises his self-awareness, in other words, irony with regard to his own work, revealing that it is the awareness of the lie itself that grants truth to the work, and that "modern self-irony, destined to subvert certainties until they are reduced to pretense, is also a pretense"3.
However, the fable does not stop here, but continues on the back of the pictures. On this usually immaculate and invisible side, De Val plays, entertains himself, amuses us and invites us to play with him. By showing us the back, he turns us into accomplices: we share the secret hidden behind the picture. Here continues his reflection on identity, authorhood, appropriation and pretense. It is also here that De Val places the finishing touch on his "stories": the title. Essential to his works, it suggests new "readings" while also revealing his ironic and critical interpretation of history, culture and the passage of time.
As an epilogue, a prologue by Borges4: "It is a laborious and impoverishing act of madness to compose vast books; to spread over five hundred pages an idea that could be perfectly expressed orally in just a few minutes. A better procedure is to pretend that such books already exist and offer a summary, a comment" or, I would add, "a painting".

Esther Montoriol

(Translation from spanish)
1. "Ficciones" [Fictions] is the title of a book by Jorge Luis Borges which includes the story "La Biblioteca de Babel" [Babel's Library].
2. A character from "Se una notte d'inverno un viaggiatore" by Italo Calvino, who has learned not to read in order to experience what our world, full of writing, must look like to one who does not read.
3. "Sabidur’a de la ilusión" [Wisdom of illusion], by Rafael Argullol, Ed. Taurus.
4. "Ficciones" [Fictions] by Jorge Luis Borges, Alianza Editorial.
* Translator's note: the author is playing with the well-known Spanish saying "El saber no ocupa lugar" [knowledge does not take up space].